En una entrevista para la revista
Sin embargo, reconoce que su divorcio en diciembre de 2011 fue muy difícil para ella. “Hubo dos semanas de mi vida tras enterarme de la verdad de mi matrimonio en las que yo estaba como, ‘Ok. Muy bien. No puedo sentir esto. Esto es demasiado intenso en este momento’”, recuerda.
Entonces, Perry tuvo que haceruna elección y explica: “Hay dos maneras de llevarlo.
"Puedes cavar profundo debajo de las cicatrices y encontrar tejido blando de nuevo, y das un masaje y lo alimentas y lo devuelves a la vida, poco a poco, mediante un buen abastecimiento”, explica. “Lo superé con caminatas y vitaminas y terapia y oración y buenos amigos”, añade.
Ahora tiene una relación con John Mayer desde julio de 2012 con sus idas y venidas. Explica que se tomó un descanso de su novio para ahondar un poco más en sí misma y conseguir superar el dolor de su divorcio. “Fue como un jarro de agua fría lo que me estaba ocurriendo. Esto es lo que te permite un nuevo despertar, te das cuenta de que si no te quieres a ti misma, no vas a ser capaz de mantener el amor que quieres. Aún necesitaba tratar todo el tema de mi exmarido. Es como que si te mantienes hablando sobre ello, pareciera que realmente te importa y no es así”, relata.
Afortunadamente Perry y Mayer se encuentran felices ahora y ella lo describe como un relación madura. “Es simplemente un compañero fantástico”, desvela. “He sido fan de él durante mucho tiempo. Tiene una mente brillante. No puedes discutir con él”, asegura.